El Compás y el Águila: Historia de la Masonería en México.


LA MASONERÍA EN MÉXICO: UNA HISTORIA DE FRATERNIDAD Y CAMBIO SOCIAL

    La masonería, con su simbolismo, rituales y énfasis en la fraternidad, tiene una rica y compleja historia en todo el mundo. En México, la historia de la masonería está entrelazada con el propio camino tumultuoso del país hacia la independencia y la configuración de su paisaje político. Desde sus inicios clandestinos hasta su influencia en figuras y eventos clave, la masonería ha dejado una marca indeleble en la sociedad mexicana.

Early Seeds of Influence (Late 18th - Early 19th Century):

    Semillas de influencia (finales del siglo XVIII - principios del siglo XIX): Las semillas de la masonería en México se sembraron durante los siglos XVIII y XIX, en gran parte a través de la influencia de ideas y personas europeas. A medida que el poder colonial español comenzó a declinar, los ideales de la Ilustración, que enfatizaban la razón y la libertad individual, encontraron un terreno fértil en los círculos intelectuales en crecimiento de la Nueva España. Las logias masónicas, a menudo operando en secreto, comenzaron a aparecer, atrayendo inicialmente a miembros de la élite educada: oficiales militares, abogados y miembros del clero

    Estas primeras logias estaban típicamente alineadas con la tradición de la Rito Escocés (más conservadora) o la Rito de York (más liberal), una división que daría forma al carácter de la masonería mexicana durante décadas. El secretismo que rodeaba a las logias, unido a su asociación con los principios de la Ilustración, las convirtió en centros naturales de debate político, a menudo orientado hacia aspiraciones de mayor autonomía respecto a España.

Las Guerras de Independencia y los años posteriores (1810-1850):

    En la Guerra de Independencia de México (1810-1821) se produjo un importante solapamiento entre la afiliación masónica y las filas de los revolucionarios. Se cree que muchas de las figuras clave que lucharon por la independencia, como Miguel Hidalgo y José María Morelos (aunque su participación es discutida), estuvieron influidas por estas redes clandestinas o fueron miembros potenciales de ellas. Aunque algunos siguen sin tener pruebas directas de su pertenencia formal, su adhesión a los ideales de libertad y autodeterminación sugiere un entorno intelectual moldeado por el pensamiento masónico

    Tras la independencia, la masonería siguió desempeñando un papel importante en la vida política mexicana. La joven nación se caracterizaba por intensas rivalidades políticas, que a menudo enfrentaban a centralistas contra federalistas, liberales contra conservadores. Las logias masónicas, ya divididas por rituales, reflejaron aún más estas divisiones políticas, llegando a ser influyentes en los debates que darían forma a la constitución y al gobierno de la nacióne.

La Era de la Reforma y el Porfiriato (1850-1910):

    La Era de la Reforma (1855-1876), marcada por el liderazgo liberal de Benito Juárez, supuso un momento álgido para la masonería. Juárez, conocido masón, presidió un periodo de importantes transformaciones sociales, incluyendo la separación de la Iglesia y el Estado y el establecimiento de un orden más secular y democrático. Muchos de los miembros de su gabinete y partidarios eran también miembros de la Orden, lo que consolidó la percepción de la masonería como una fuerza de progreso y modernización.

    Sin embargo, el posterior Porfiriato (1876-1911), la larga dictadura de Porfirio Díaz, supuso un cambio en el papel de la masonería. Aunque el propio Díaz no era masón, su régimen toleró las logias siempre que se mantuvieran políticamente dóciles. Muchas figuras importantes de la época, incluidos oficiales del ejército y hombres de negocios, continuaron siendo miembros, aunque en un clima en el que la disidencia política era cada vez más reprimida.

Siglo XX y posteriores:

    La Revolución Mexicana (1910-1920) trastocó el orden establecido, incluido el panorama de la masonería mexicana. La agitación política y los cambios socioeconómicos de la época condujeron a un periodo de consolidación y reorganización dentro de las logias. En el siglo XX, la masonería mexicana continuó evolucionando, centrándose en el trabajo caritativo, el compañerismo fraternal y la promoción de valores éticos entre sus miembros.

    Hoy en día, la masonería en México sigue existiendo, aunque su influencia política es menos pronunciada que en épocas anteriores. Sigue siendo una organización fraternal centrada en el desarrollo personal, el compromiso cívico y la preservación de sus rituales y enseñanzas tradicionales. Su historia sigue siendo un fascinante reflejo del complejo entramado de la historia mexicana, que demuestra cómo las sociedades secretas pueden reflejar y moldear el destino de una nación.


Masones mexicanos famosos:

    Es importante tener en cuenta que los registros de la masonería a menudo no están disponibles públicamente, y algunas atribuciones pueden ser debatidas. Sin embargo, las siguientes figuras se citan a menudo como notables francmasones mexicanos:

  • Benito Juárez: (1806-1872) Figura fundamental de la historia de México, Presidente durante la época de la Reforma y firme defensor de los principios liberales.
  • Ignacio Comonfort: (1812-1863) Presidente de México durante la Guerra de Reforma, conocido por sus inclinaciones liberales.
  • Juan N. Álvarez: (1790-1867) Pieza clave en la Guerra de Independencia y Presidente de México..
  • Miguel Miramón: (1831-1867) General conservador y Presidente de México durante la Guerra de Reforma. (Su membresía masónica pone de manifiesto la división dentro de la masonería mexicana por líneas políticas).
  • Melchor Ocampo: (1814-1861) Destacado político liberal y abogado, conocido por sus ideas progresistas.
  • Francisco I. Madero: (1873-1913) Figura clave de la Revolución Mexicana, conocido por oponerse al régimen del Porfiriato.
  • José María Lafragua: (1813-1875) Notable abogado, político y escritor. Desempeñó varios cargos en el gobierno federal.
  • Ponciano Arriaga: (1811-1864) Abogado, político y uno de los autores de la Constitución de 1857.

    Esta lista no es exhaustiva, y hay muchas otras figuras en la historia de México que pueden haber sido masones, pero cuya afiliación no está definitivamente confirmada. El legado de la masonería en México sigue siendo un tema complejo y fascinante, que continúa siendo explorado por historiadores e investigadores.



Colaboración/Investigación del: Q∴H∴ Kristian A. Loeza

Segundo Diacono de California Hispanic & Latin American Research Lodge.